El pasado Martes día 1 de Septiembre, en el Periódico de Cataluña publicaron un articulo de un maestro budista francés llamado Alain Krystaszekv que está arrasando con su libro L’Esprit de la Pétanque, (El espíritu de la petanca).
Texto extraido del Periodico de Cataluña.
“Antes, mucho antes de convertirse en maestro budista, Alain Krystaszekv nacido en Francia, pero de padres polacos era un buen jugador de petanca.
Algunos dicen que excelente. Quienes sabían del fervor de su afición no se extrañaron demasiado cuando, muchos años después, supieron que aquel que con el tiempo acabó haciéndose llamar maestro Kaisen no solo había seguido practicando, sino que había contagiado a sus compañeros de meditación y había convertido el juego en una práctica común en el Templo
Zen del Pico Luminoso, en el sur de Francia. El maestro reveló más tarde y es inevitable pensar en todos los abuelos que cada día se dedican a lo mismo la siguiente verdad: la petanca y la meditación zen son hermanas.
Tienen rasgos en común. Aquel que juega como se debe, dijo Kaisen sin pestañear, puede paladear la eternidad.
Práctica superior Kaisen («ermita solitaria de la montaña profunda») encontró en algún momento que su teoría debía ser impresa y divulgada, y acaba de publicar un libro en el que recorre los 35 años que lleva meditando y jugando. «Si se practica la petanca con el espíritu adecuado, entonces puede hacerte crecer como persona»,asegura este hombre que ya es abuelo y venerable y que en las fotos que le han sacado para promocionar el libro aparece siempre con una resplandeciente sonrisa. 
El éxito de El espíritu de la petanca es lo de menos: tal vez lo más importante es que ha sacado de sus madrigueras a veteranos jugadores que, a juzgar por sus declaraciones, llevaban años intuyendo (o sabiendo) que la petanca es una especie de práctica superior, capaz de hacer mejores a las personas, y que por supuesto, si se practica con el espíritu adecuado puede incluso propiciar momentos de epifanía.
«La excelencia se consigue –argumenta el maestro– dejándote llevar y apartándote de los aspectos ilusorios. En determinado momento, se produce una unidad entre el cuerpo, el alma y tu propia respiración. Te olvidas de ti mismo y de los otros. No estás aquí ni allá; estás en todas partes».
Aplauso de un campeón. Uno de los que suscribieron entusiasmados la teoría del maestro Kaisen fue nada más y nada menos que Philippe Quintais, 12 veces campeón del mundo y una especie de héroe nacional para los franceses.
Quintais leyó el libro y al llegar a la última página decidió que tenía que conocer al iluminado, cogió un avión y se plantó al poco tiempo en la Dordoña, en el Templo del Pico Luminoso; parece que jugaron varias partidas, hablaron y se gustaron. «No soy un fanático del budismo declaró el rollizo, campechano Quintais, pero gente como esta te recarga las baterías».
¿Acabará la petanca, merced a la experiencia y las teorías del maestro Kaisen, por obra y gracia de la enorme difusión que está teniendo su libro (de momento en Francia), compartiendo sitial al lado de prácticas redomadamente zen como el tiro con arco, la caligrafía o el combate bushido? Quien se tome el trabajo de leer las más de 200 páginas de la obra entenderá que para el autor la pregunta es retórica. Por supuesto. «Debemos perfeccionarnos sin cesar –dice–, aprovechar que es el cuerpo-espíritu el que apunta y lanza la bola y el que se opone a los otros jugadores. Es entonces cuando el deporte se convierte de repente en arte, práctica y búsqueda de un mejoramiento a la vez mental, espiritual y corporal».
Artículo de: Marcelo Bernárdez.
El Club de Petanca Axati quiere felicitar al Club Petanca La Campana por su reciente ascenso a 1ª Division.
ENHORABUENA CAMPEONES!!!!
